RENTA BASICA: DERECHO DE CIUDADANÍA
Publicado en El Levante 28-11-2005

Tanto la reforma del Estatuto como también el pacto firmado por el Consell y los sindicatos (agentes sociales) nos habla de la instauración de una Renta Básica o bien de una "Renta Mínima Garantizada". Pero ¿qué es la Renta Básica? Si nos remitimos a Rafael Pinilla encontraremos la siguiente definición de la Renta Básica: "un ingreso modesto pero suficiente para cubrir las necesidades básicas de la vida, garantizado a cada miembro de la sociedad como un derecho y no sujeto a otra condición que la de ciudadanía o residencia".
Quisiera incidir sin embargo en otro aspecto de la Renta Básica. Aquél en el que incidieron revolucionarios como T. Paine cuando afirmaron que debido a la "apropiación de la tierra" por parte de una minoría, cuando aquella era una propiedad común a todos, "todo propietario de tierra cultivada debe a la comunidad una renta del suelo" para convertirla en un fondo. O incluso, lo que defendieron los revolucionarios franceses y, en particular, Robespierre cuando se enfrentóa al derecho a la propiedad privada. Robespierre frente a este derecho defendía otro derecho que la limitaba: "¿Cuál es el primer derecho de la sociedad? Mantener los derechos imprescriptibles del hombre. ¿Cuál es el primero de estos derechos? El de existir".
Es un derecho de existencia como defiende Daniel Raventós. En un mundo donde el sistema se apropia de todo, incluida el ser vivo y las patentes, defendemos el derecho a existir. Defendemos el derecho a que las necesidades básicas estén cubiertas. Se podrá criticar dicha propuesta diciendo que estamos creando vagos. Ahora bien cuando las relaciones entre las personas no son simétricas, cuando los seres no son "independientes" para relacionarse ¿por qué no dar un instrumento? que permita que el individuo tenga una libertad real.
Las sociedades actuales con la actual política económica hegemónica -el neoliberalismo- crea paro y exclusión. Crea ciudadanos de primera y de segunda. Y al inclinar la balanza por una contractualidad central basada en la panacea de un mercado puro libre de cualquier obstáculo que suponga frenar al mercado, dicha sociedad acerba la competencia entre los trabajadores y divide a los sindicatos, los cuales se inclinan a defender a sus afiliados y pasan de las causas que llevan a la pobreza y a la marginación. Pero la ciudadanía ya no puede ser la que pensaban los primeros liberales (y que fue criticada por Marx). Hoy la ciudadanía es más compleja y, como dice Adela Cortina, no se puede compartimenta. La ciudadanía hoy tiene tres dimensiones que se interrelacionan produciendo una symploké. La dimensión económica que permite al individuao "la capacidad de ser un actor económico", pero al mismo tiempo la dimensión social se refiere a los "medios de existencia" que permitan a los individuos la capacidad de participar en las decisiones democráticas. Por consiguiente, el Estado debe intervenir cuando los individuos no tengan cubierta sus necesidades. Y esto desde el republicanismo es posible ya que no sería una interferencia arbitraria en la vida de los individuos, sino que permitiría una libertad real. La Renta Básica desde esta perspectiva sería una cuestión de justicia social ya que supondría compensar las desigualdades sociales que conlleva un sistema económico como el actual.
Javier Méndez-Vigo

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